Mago de Oz: Policías son "corruptos"

Integrantes de la banda Mago de Oz afirmaron este martes -a través de un video grabado- que algunos policías bolivianos so corruptos, porque presuntamente fueron extorsionados durante su última estadía bochornosa en el país.

La formación madrileña de folk metal Mägo de Oz subió a Youtube un extenso comunicado en el que relata en detalle todo lo acontecido durante su estancia en Bolivia, desde que aterrizaron en el país hasta que lo abandonaron hace unos días después.

La cancelación de su show sinfónico “Diabulus in Opera” en La Paz provocó un conflicto con el promotor, Gustavo Tobar.

De hecho, varios miembros de Mägo llegaron a ser detenidos y encerrados por la policía.

Resumen del video (textual de mariskalrock.com)

"Si bien Gustavo Tobar había trabajado antes con Mägo de Oz y todas las experiencias habían sido muy malas, los conciertos se habían “salvado”. 

Sin embargo, en esta ocasión los requerimientos técnicos no estuvieron a la altura: la orquesta no tenía espacio físico y el equipo no llegó a tiempo. Por ello, se decidió ofrecer el espectáculo 30º aniversario, a pesar de que el equipo necesario para ejecutar el show llegó a las siete de la tarde y las puertas se abrían a las ocho.

Txus Di Fellatio, sobre las cancelaciones posteriores (ya sea por la bronquitis de Zeta o la lluvia que mojó el equipo de Mägo dado que el escenario no estaba bien techado), quiere dejar claro que “ningún músico quiere suspender un concierto” y que todos los “requerimientos técnicos son a beneficio de los fans”, ya que “no se han pedido limusinas u hoteles de cinco estrellas”.

Al final, Mägo quiere que todo salga bien porque la gente paga mucho dinero para poder disfrutar de su directo.

Al regresar al hotel la noche del primer show en La Paz, Ivonne recibe la llamada de Zeta, quien se encontraba mal. Acude a un médico, quien diagnostica su enfermedad y firma el certificado médico. En ese momento, la road manager acude a Gustavo Tobar para comunicarle la cancelación del show en Potosí.

Para sorpresa de Ivonne, el promotor afirma que el documento es falso y exige dinero de compensación.

Al día siguiente, Ivonne se vuelve a encontrar con Tobar y su socio, EnriqueMenzoza, quien dispuso una cantidad de dinero delante para que Mägo de Oz fuera a Potosí en avión privado. Insiste en varias ocasiones en que aceptara el dinero, pero la road manager se reafirma en que no es una cuestión de dinero, sino de salud.

Es entonces cuando entran de cinco a siete personas a la sala, quienes quisieron tomar una foto de Ivonne con el dinero: todos ellos eran policías dispuestos a detenerla. No permitieron llamar a la embajada, ni a un abogado: la esposaron y la llevaron a la comisaria.

Tras 28 horas retenidas, la liberaron por falta de pruebas por las que fue acusada: extorsión y fraude. Según ella, fue una manipulación y se rompieron los derechos de una ciudadana mexicana en un país diferente.

Moha, quien recibió el mensaje por parte de Ivonne de que estaba siendo detenida, decidió llamar a Augusto, mánager en España de Mägo de Oz. Augusto le recomienda llamar al consulado, pero cuando baja al vestíbulo, dos o tres policías se le acercan y le insisten de ir a comisaría, sin ninguna explicación.

Ya en el centro de detención, le ponen delante una bolsa con polvo blanco y le acusan de haberla encontrado en su coche. Moha lo niega y le mandan a una celda a esperar. Como él mismo remarca, lo curioso es que el día anterior había estado en el Congreso recibiendo en nombre de Mägo de Oz un reconocimiento por el hermanamiento de los pueblos.

Según él, la detención y la acusación de posesión de drogas fue una “sensación humillante y vejatoria, además de muy injusta”.

Txus, a todo esto, está dormido. Cuando se despierta, ve los mensajes de que han detenido a Ivonne o Moha. Él creía que, simplemente, estaban declarando para explicar lo sucedido.

En cuanto baja al vestíbulo, se le acercan tres personas de paisano diciendo que son policías y que les tiene que acompañar. Txus acepta y en la comisaría le toman fotos, huellas y se le encarcela. En una sala, un policía le dice si quiere pasar las “ocho horas bien o mal”. 

En un cuarto adyacente, sin cámaras, el batería le entrega 100 dólares, el policía sonríe y le trae una manta. Aunque la banda posee los nombres de los “policías corruptos“, no los compartirá por ahora, ya que tienen personas en Bolivia que podrían verse en peligro si fueran publicados.

Finalmente, se les presenta una opción para salir de la cárcel: entregar 50.000 dólares en tres horas y tocar gratis al día siguiente en La Paz.

Aunque el acuerdo es abusivo y los “contratos estaban suspendidos porque Tobar incumplió el contrato”, deciden firmar para conseguir sacar de prisión a Ivonne, acusada de extorsión y fraude.

De esta forma, todo el dinero recaudado en Bolivia pasa a la promotora de Gustavo Tobar. Horas después, la fiscalía de Bolivia da la razón al grupo y, tras ocho horas, desestima la denuncia. La banda es completamente libre, aunque todavía tiene que ofrecer un último concierto en La Paz con graves problemas de sonido.

Ya de vuelta al hotel, Txus recibe varias llamadas que recomiendan que Mägo de Oz revise sus maletas, ya que quizá podrían tener alguna “sorpresa”.

Afortunadamente, pudieron abandonar el país con el apoyo de la promotora Esuesa, compañía que hizo todo lo que tuvo en su mano para ayudar a la banda.

El vídeo finaliza con la promesa de que Mägo volverá a Bolivia y una serie de vídeos de diferentes promotores latinoamericanos que reafirman su confianza en la agrupación".

(mariskalrock.com)