Según el reporte se aplicaron 6.444.407 vacunas de la primera dosis, 5.251.678 de la segunda; 2.374.378 de la tercera, 569.968 de la cuarta dosis y 998.668 de la dosis única.
  • Parada militar en Cochabamba
    Morales cuestionó que “grupos de derecha” pidan respeto al resultado del 21 de febrero, pero no planteen una agenda de trabajo
  • Delincuentes están identificados
    "El hecho de haber abandonado la joya no significa que haya quedado impune el hecho", afirmó Aguilera.
    Contenido: 

    La Policía confirmó este miércoles el hallazgo de la banda y medalla presidencial, sustraídas un día antes de un vehículo en la ciudad de El Alto.

    El director de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen (FELCC) de La Paz, Johnny Aguilera, informó que una llamada anónima al Canal 2 de La Paz permitió la ubicación de la mochila en la que se encontraban ambas enseñas nacionales.

    "Se recibe una llamada telefónica anónima que hace referencia que se encontraba abandonado en el atrio de la Iglesia de San Pedro, en unas bolsas negras, en cuyo interior estaba este valioso material", dijo.

    El jefe policial señaló que dos ciudadanos peruanos estarían involucrados en el robo de esas pertenencias y que serán aprehendidos en las siguientes horas

    La sustracción de los símbolos se produjo en inmediaciones de las calles Jorge Carrasco y 8 de la zona 12 de Octubre de la urbe alteña.

    El teniente Roberto Ortiz Blanco se encontraba a cargo de la seguridad de esas pertenencias y mediante una denuncia presentada en la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen, se supo que  fue objeto de robo.

    "El hecho de haber abandonado la joya no significa que haya quedado impune el hecho", afirmó Aguilera.

    El comandante indicó que se investiga a ambos sujetos, en tanto que Ortiz se encuentro detenido y a disposición del Ministerio Público. Está acusado de incumplimiento de deberes.

  • Prosiguen investigaciones
    En el documento se menciona que la detención del oficial es paralela a una investigación que se abrió a los mandos de la Casa Militar.
    Contenido: 

    El Ministerio de Defensa confirmó este martes que el teniente Roberto Ortiz Blanco se encuentra detenido, a raíz de la sustracción de la banda y medalla presidencial que estaba bajo su responsabilidad.

    En un comunicado de ese portafolio de Estado, la custodia se encuentra a cargo del Banco Central de Bolivia pero que se entrega a la Casa Militar para actos oficiales.

    "La custodia permanente de este emblema está a cargo del Banco Central de Bolivia en sus bóvedas y es puesto a disposición de la Casa Militar que es responsable exclusivo de su resguardo durante las fiestas patrias. Al momento se ha procedido a la detención del oficial encargado de su seguridad y se ha abierto una investigación a los mandos de la Casa Militar", señala.

    En el documento se menciona que la detención del oficial es paralela a una investigación que se abrió a los mandos de la Casa Militar.

    “La Policía Boliviana, sus servicios de inteligencia y toda la institucionalidad del Estado han sido puestos a disposición de la investigación para dar con los culpables del robo en el menor tiempo posible”, agrega.

    Hechos

    Un reporte policial -que se conoció en las últimas hora-s destaca que el teniente Roberto Ortiz manifestó que habría estacionado el vehículo, placa 4033 FXR, en la avenida Jorge Carrasco entre calle 8, zona 12 de Octubre.

    El militar luego de hacer sus necesidades en un mingitorio retornó al automóvil y encontró la chapa forzada de la puerta lateral izquierda.

    El caso 288988 de la Fuerza Especial de Lucha Contra el Crimen se encuentra en proceso de investigación.

  • Markasana
    Qharuruw machaqa Palacio de Gobierno sata jach’a utax ch’allxat’atani. Ukanx phisqha Ministerios ukanakay irnaqapchispa ukham qhananchawayapxi.
  • Jichhuruw amtapxi
    Jichhuruw khaysa Cochabamba markanx Fuerzas Armadas tuqinkirinakan urupax amt’ata. Ukanx niya tunka phisqhani waranqa Fuerzas Armadas tuqin irnaqirinakay chikañcht’asiwayapchi ukham yatiyapxi.
  • Operativos en El Alto
    La policía realizó esta madrugada intensos operativos para dar con los autores de la sustracción de objetos presidenciales
    Contenido: 

    La policía realizó esta madrugada intensos operativos para dar con los autores de la sustracción de objetos presidenciales, de un vehículo estacionado en la calle Carrasco, zona 12 de Octubre de la ciudad de El Alto.

    Según varios reportes, desconocidos hurtaron la banda y medallas presidenciales, que se encontraban en la movilidad.

    El hecho delincuencial se produjo al promediar las 10 de la noche, aunque por el momento se desconocen mayores detalles.

    En los operativos de búsqueda participó el viceministro de Régimen Interior, José Luis Quiroga.

    El Ministerio de Gobierno todavía no emitió pronunciamiento alguno.

    El director de Seguridad Ciudadana del Gobierno Autónomo Municipal de El Alto (GAMEA), Dorian Ulloa, dijo a Radio San gabriel que hubo despligue policial para capturar a los malhechores.

    "Evidentemente hubo despliegue policial buscando estos artículos que son parte de la historia dle país, nosotros estamos prestos a coadyuvar. Hay cámaras de seguridad en las inmediaciones del lugar donde al parecer ocurrió el hecho. Nosotros estamos a la espera que nos convoquen para coadyuvar", señaló.

  • No cumplió con deberes
    Vecinos de la zona y sus padres impidieron que el cadáver de la menor fuera trasladada a la morgue, para evitar más gastos
  • Empleado de UIF a prisión
    Teresa Morales reveló este martes que fue ella quien denunció al funcionario de UIF por mal cálculo de las cuentas de Evo
    Contenido: 

    La directora de la Unidad de Investigaciones Financieras (UIF), Teresa Morales, aseguró este martes  que un funcionario de esa entidad sumó erróneamente el saldo de la cuenta bancaria del presidente Evo Morales, lo hizo “premeditadamente” y con “mala fe”.

    “Se trata de sumar cinco números. Los cuatro (cuentas bancarias) son en bolivianos y uno en dólares y él (funcionario) ha metido el dato de la suma de todos ellos, suponiendo que el de dólares era en bolivianos, en vez de realizar la transformación. Cualquier funcionario de 5 años en una Unidad en Investigaciones Financieras, que usa el Excel todos los días, tiene la manera de calcular esto”, explicó.

    “Yo lo he acusado de dolo (…) La Fiscalía sacó el computador del funcionario y con peritos van a verificar si efectivamente es como yo lo he dicho con dolo y premeditación o fue un error”, dijo.

    La UIF la semana pasada publicó los datos de las cuentas bancarias de Morales y en una primera instancia informó que el saldo de Morales era Bs 406.391,93, pero después de alrededor de dos horas se rectificó la suma a Bs 732.076,25. El funcionario que hizo el mal cálculo fue acusado de tres delitos y enviado a la cárcel de San Pedro de manera preventiva. 

  • 193 independencia utjatapat amtawayapxi
    Kunayman suyunakana ukhamaraki jach’a markanakans, aka Bolivia markasan 193 maranaka Independencia utjatapat, Desfiles Cívicos satakis ukanakamp amtawayapxi.
  • Pidió $us 4.000 por sentencia
    Ambas personas fueron aprehendidas en flagrancia el pasado jueves luego de recibir $us 1.500 dólares de una procesada
    Contenido: 

    La justicia cruceña envió al penal de Palmasola al juez Jhonny Zenteno y su auxiliar Jessenia Camacho, por la comisión del delito de Concusión y Cohecho Pasivo Propio.

    Ambas personas fueron aprehendidas en flagrancia el pasado jueves luego de recibir $us 1.500 dólares de una procesada, para favorecerla con una sentencia en un caso de acción privada

    La información fue proporcionada por el Fiscal Departamental de Santa Cruz, Freddy Larrea Melgar, quien señaló que la audiencia de medidas cautelares se desarrolló en el Juzgado Quinto de Instrucción en lo Penal.

    El Ministerio Público presentó los elementos de convicción que dieron lugar a la detención preventiva.

    “En la audiencia también se demostró la existencia de riesgos procesales como el peligro de fuga y obstaculización de la investigación”, agregó Larrea.

    De acuerdo con la información, hace tres semanas el juez llamó a la persona que está siendo procesada en un caso de acción de privada y le pidió 4.000 dólares a cambio de favorecerla con una sentencia.

    En la conversación esta persona le explicó que era imposible conseguir los 4.000 dólares, por lo que acordaron que sea 1.500 dólares.

    La entrega fue pactada para la tarde del jueves en la tienda de la procesada, pero el Juez cambia el lugar de entrega y envía a su auxiliar a recibir el dinero.

    “Justo cuando la auxiliar recibe el dinero en un sobre blanco es aprehendida, dando a conocer que fue el juez quien la llevó hasta ese lugar”, señaló el Fiscal Departamental.

    Al percatarse de la aprehensión de su auxiliar, el administrador de justicia intentó escapar, pero fue aprehendido.

  • Reitera "bonanza" económica
    "A pesar del contexto externo adverso y de opiniones malintencionadas de algunos analistas, Bolivia ha mantenido su crecimiento"
  • Álvaro García Linera
    “Si en 180 años se llegó a producir 9.000 millones de dólares, en apenas 12 años hemos multiplicado por cuatro"
  • En acto polarizado
    Durante su exposición, parlamentarios de la oposición gritaron la consigna “Bolivia dijo NO” y su bancada coreaba su nombre
  • Evo estuvo en el Te Deum
    El cardenal Toribio Ticona, en la oportunidad, reclamó unidad a los bolivanos y desarrollar en paz los distintos eventos organizados para este lunes.
  • Efectos de la nevada
    Existe la duda si la sesión se cumplkirá en el atrio de la Casa de la Moneda. En las siguientes horas se definirá
  • Fuga, rescate y muerte
    Eufórico por su eventual triunfo y totalmente embriagado se le ocurrió llamar a un policía de Chonchocoro, al que había intentado sobornar varias veces para que lo ayude a fugar,
    Contenido: 

    (*) Tomás Molina Céspedes

    Atardecer de un viernes en Chonchocoro. Había sido convocado de urgencia al penal por el asesinato de un joven preso a manos de sus sanguinarios rivales.

    Luego del levantamiento del cadáver horriblemente acuchillado en el COMEDOR del penal, donde ocurren todos los crímenes, se me acercaron el Vinchita y Opimi, dos jóvenes delincuentes cruceños que habían sido traídos de Palmasola por razones de seguridad y mala conducta.

    El primero, casi un niño, con carita angelical y con los ojos llorosos me suplicó su traslado inmediato al Penal de “San Pedro”, ante la amenaza de muerte que había recibido de su paisano el Choco.

    “Yo seré el próximo en ser ejecutado, el Choco ha ordenado mi baja, tengo los minutos contados, por favor doctor salve mi vida”, me rogó. Y, lo propio dijo su compañero Opini, otro preso joven que también señaló que estaba amenazado de muerte y que peligraba su vida en Chonchocoro.

    Ambos no se separaban de mí y me seguían, controlados por otros presos que al parecer querían conocer mi decisión, para pedir lo mismo.

    Una hora antes había sido ejecutado un muchacho conocido como el Guarayo y meses antes el Chichuriro, por órdenes del mismo jefe mafioso de la prisión.

    Me encontraba aturdido por el espantoso escenario del crimen que se ofrecía ante mi vista en el comedor del penal, con manchas de sangre en las paredes, mesas y asientos.

    No sé qué raro hechizo tenía este lugar, teatro preferido de ejecuciones entre presos, no obstante que todas sus mesas y sillas son de hormigón armado, empotradas al piso.

    ¿Era por el descuido que causa el hambre? ¿Por ser lugar obligado al que deben acudir los presos para recibir su rancho? ¿Teatro preferido para saldar cuentas?

    Los dos muchachos, rodeados de otros presos, me insistían en su traslado, mientras mi mente divagaba en los deberes que me imponían mi conciencia y mi cargo.

    Estaba consciente que ese traslado sólo podía ordenarlo el Juez de Ejecución Penal, pero ¿cuánto tardaría el trámite? ¿Cuándo llegaría la orden de traslado?

    Tenía la firme convicción que el primer deber del régimen penitenciario es garantizar la vida de los presos y el primer derecho del preso conservar su vida.

    El tiempo apremiaba y tomé la única decisión que me imponía mi consciencia y la limpidez de mis actos.

    Era viernes y casi al morir la tarde firme la orden de traslado al penal de San Pedro para los dos convictos. El lunes próximo iniciaría los trámites legales del traslado.

    El nombre del Vinchita estaba ligado al crimen horrendo que ya conocen ocurrido en Santa Cruz. Su cara de niño no delataba su alta peligrosidad.

    A los 17 años, luego de una maratónica carrera delictiva había alcanzado el máximo grado de la pena en Bolivia por el asesinato de una joven a la que había matado de la manera más traidora y cruel por robarle su vagoneta.

    El otro, Opini, estaba condenado por haber matado a un policía.

    Era fin de semana y aquel viernes viajé a Cochabamba con la mente cargada de emociones y temores. Las posibilidades reales de caer en una trampa, de ser mancillado mi honor y de tomar decisiones riesgosas eran constantes en mi trabajo.

    Todo, absolutamente todo, se podía esperar de gente condenada a la máxima pena, que ya nada tenía que perder. ¿Qué hubiese ocurrido si no tomaba esa decisión?

    Con seguridad los familiares de dichos delincuentes y en especial los presos me habrían crucificado con todo tipo de acusaciones.

    El domingo Cochabamba amaneció con un sol primaveral estupendo. Nada hacía presagiar el peligro.

    Al mediodía, cuando me encontraba en un local de la campiña natal con mi familia, recibí por el celular una noticia que pinchó con acero candente mi cuerpo y mi alma. El Vinchita y Opimi esa madrugada se habían fugado del penal de San Pedro.

    Quedé aturdido, como cuando recibes un golpe y reaccionas de manera confusa e imprecisa. Me trasladé de inmediato al aeropuerto y de allí a La Paz.

    Durante el viaje cavilaba en lo que me esperaba. Nadie creería en la honestidad de mi decisión.

    Para mis adversarios y gratuitos enemigos sería fácil inventar historias y hacer leña del árbol caído. En estas tierras del Alto Perú de lo primero que se acusa a un funcionario público, con o sin razón, es de corrupción..

    Al día siguiente, lunes 27 de septiembre de 2004, la noticia de la fuga del Vinchita ocupó los primeros espacios de la prensa escrita, radial y televisiva.

    Por el momento nadie se preguntaba por qué ese reo se encontraba en San Pedro y no en Chonchocoro, eso vendría después, por ahora el escándalo giraba en torno a las circunstancias de la fuga. 

    La historia oculta es que todo había sido planificado al detalle. Mujeres vinculadas a ambos presos, ayudados por la mafia, habían preparado y participado en la espectacular fuga por una de las altas murallas del penal.

    Afuera los esperaban y todos, fugitivos y cómplices, se perdieron en las sombras de aquella madrugada.

    Esta vez el cubil de los delincuentes estaba ubicado en una casa próxima al Parque Villarroel de la ciudad de La Paz. Allí estalló el desenfreno, el festejo con mujeres, alcohol, droga y música.

    El golpe había sido espectacular y valía la pena festejarlo después de todas las privaciones sufridas en Chonchocoro. Y, mientras los delincuentes festejaban su grandiosa fuga, la policía se ponía en máxima alerta, poniendo en funcionamiento todos sus mecanismos de control tecnológico y vigilancia rutinaria.

    La Paz estaba cuadriculada con un radar que controlaba al detalle toda llamada telefónica que entraba o salía de cualquier rincón de la ciudad. Y, la policía esperaba un error, un solo error que podían cometer los prófugos para atraparlos.

    No se desanimaron y esperaban con paciencia gatuna su gran oportunidad. Y, Vinchita por segunda vez cometió el gran error de su vida.

    Eufórico por su eventual triunfo y totalmente embriagado se le ocurrió llamar a un policía de Chonchocoro, al que había intentado sobornar varias veces para que lo ayude a fugar, recibiendo evasivas y sólo esperanzas a largo plazo.

    Molesto por lo que le había hecho esperar, sin atender sus constantes pedidos, le llamó al policía y casi a gritos le dijo que ya no necesitaba su ayuda, que ya estaba libre y a tiempo de despedirse lo mando al carajo.

    El policía dio parte a su Comando de la llamada recibida y los organismos técnicos de la institución empezaron a rastrear la procedencia de la llamada, llegando a ubicar con precisión matemática el lugar desde el que se había hecho la llamada. La casa fue rodeada y los prófugos y sus secuaces fueron atrapados cuando todos dormían la mona, después de la tremenda farra que se habían dado el sábado y el domingo. 

    Eran las 13.30 de aquel lunes, me encontraba tendido en la cama de mi albergue, cuando otra llamada sacudió mi ser. Los prófugos acababan de ser recapturados.

    La noticia parecía inverosímil. La aterradora vigilia había terminado. 

    La recaptura fue noticia de primer plano en todos los medios de comunicación. La fotografía que ilustra esta nota es la que se tomó cuando ambos prófugos son ingresados nuevamente a San Pedro y después enviados a Chonchocoro, donde el Vinchita fue finalmente asesinado por sus propios paisanos de prisión, con punta y a la hora de la cena. 

    Y, ¿Cómo es el COMEDOR de Chonchocoro?

    Es un amplio salón frío con mesas y asientos de hormigón empotrados al suelo. Nada alegra la vista, todo tiene el color del cemento y su interior más se parece a la morgue de un hospital que a una taberna.

    Por más que se mire a todo lado, el tétrico aposento no tiene nombre y tampoco cuadros ni almanaques en sus paredes, porque aquí el tiempo está congelado y la única distracción, a la manera de un circo romano, es la muerte entre sus comensales justamente a la hora del almuerzo o la cena.

    El entorno fúnebre de este lugar, antesala del infierno, ciertamente no es zona recomendable para sibaritas ni amantes de la buena cocina. 

    El recuerdo de la espectacular fuga, recaptura y muerte del Vinchita, me convence que a veces en la vida, cualquiera que sea la decisión que tomes, mucho más si trabajas con presos condenados a la pena máxima, siempre estarás AL FILO DE LA NAVAJA y en riesgo permanente de caer en desgracia o en algo peor.

    En la última visita que hice a Chonchocoro, en diciembre de 2016, pregunté al “Choco”, que aún es inquilino del penal, qué había pasado con Vinchita.

    “Lo carnearon como a perro en el COMEDOR”, fue su respuesta lacónica y brutal.

    (*) Escritor y Exdirector de Régimen Penitenciario

  • Arrestaron a 14 antisociales
    "Agentes encubiertos y de uniforme arrestaron a estos antisociales que querían atentar
  • Mejora en servicios básicos
    "El Programa Más Inversión para el Agua 'Mi Agua' busca mejorar las condiciones de vida de la población"
  • Carretera Cochabamba-La Paz
    El vehículo cayó al precipicio, aproximadamente 200 metros. Penoso rescate de víctimas durante toda la noche
    Contenido: 

    Un nuevo accidente de tránsito se registró la tarde del viernes en la carretera Cochabamba-Oruro, ocho personas perdieron la vida y siete heridas a causa de la caída de un minibús en el kilómetro 101, sector Tacopaya.

    Según el director del Organismo Operativo de Tránsito, Alexander Rojas, el vehículo se precipitó a un barranco de unos 200 metros de profundidad por el ingreso al municipio antes mencionado.

    "Tenemos ocho muertos y siete heridos", dijo a la estatal ABI.

    Rojas explicó que ese incidente vial se registró cerca de las 17h00 y los policías que atendieron el caso trabajaron en el rescate de heridos y los cuerpos de los fallecidos durante toda la noche.

    Añadió que el vehículo cayó al precipicio cuando se trasladaba de la localidad de Tacopaya hacia la ciudad de Quillacollo con cerca de 20 pasajeros.

    "Las causas del embarrancamiento todavía no fueron establecidas. Estamos hoy recién en eso", indicó.

    Todavía no se conocen las causas del accidente, aunque se presume que el choer perdió el control del motorizado.

    Fallecidos

    1. Antonia Zardón Castellón (47),

    2. Martha Zardón Castellón (48)

    3. Fortunata Zardón Castellón (40)

    4. Margarita Escobar Zardón (19)

    5. Albertina Onofre Jachata (24)

    6. NN

    7. NN

    Heridos

    1. Feliz Silvestre Zardón (25)

    2. Dania Gutiérrez Zardón (18 meses)

    3. Angélica León Challa (61),

    4. Maite Puma Onofre (2)

    5. Daniela Tocari (8)

    6. Eulogia Ramos (17)

    7. David Choque Silvestre (18).

  • Aprehendido en Santa Cruz
    “Justo cuando la auxiliar recibe el dinero en un sobre blanco es aprehendida, dando a conocer que fue el juez quien la llevó hasta ese lugar”
    Contenido: 

    El Ministerio Público en coordinación con la fuerza pública aprehendió el jueves en flagrancia al juez Jhonny Z. A. y su auxiliar Jessenia C. V., luego de recibir 1.500 dólares para favorecer con una sentencia en un caso de acción privada.

    La información fue proporcionada por el Fiscal Departamental de Santa Cruz, Freddy Larrea Melgar, quien señaló que una vez se tomó conocimiento del caso se armó un operativo para aprehender en flagrancia a este administrador de justicia.

    De acuerdo con la información, hace tres semanas el juez llamó a la persona que está siendo procesada en un caso de acción de privada y le pidió 4.000 dólares a cambio de favorecerla con una sentencia.

    En la conversación esta persona le explicó que era imposible conseguir los 4.000 dólares, por lo que acordaron que sea 1.500 dólares.

    La entrega fue pactada para la tarde del jueves en la tienda de la procesada, pero el Juez cambia el lugar de entrega y envía a su auxiliar a recibir el dinero.

    “Justo cuando la auxiliar recibe el dinero en un sobre blanco es aprehendida, dando a conocer que fue el juez quien la llevó hasta ese lugar”, agregó el Fiscal Departamental.

    Al percatarse de la aprehensión de su auxiliar, el administrador de justicia intenta escapar, pero es aprehendido.

    “El Ministerio Público presentará en la próximas horas la imputación formal por la comisión de los delitos Concusión y Cohecho Pasivo Propio”, manifestó Freddy Larrea.

Páginas